LightReader

Chapter 4 - KOTOR 03 Una Nueva Aliada

Ayer, el único miedo que Zayne Carrick tenía era que él no ascendería al rango de caballero con sus compañeros padawans. Hoy, él teme por su vida.

 

Después de descubrir a sus amigos muertos a los pies de sus propios Maestros, Zayne huye. Tan solo ayudado por Gryph, un estafador Snivviano de poca monta. ¿Pero a dónde pueden ir ellos? Los maestros son la ley en Taris —y ellos han dicho al mundo que Zayne asesino a los padawans.

 

Su única esperanza está fuera del planeta. Desandando los pasos de su entrenamiento para averiguar lo que él y sus amigos habían visto para ser marcados por la muerte. Pero el escape de Taris lo lleva primero a la miserable Ciudad Baja — un destino que los maestros jedis, ya habían previsto

 

Comienza la narración

 

Hace años atrás, en un campo de asteroides, se veía a las camaradas del ahora prófugo padawan, todos vestidos con trajes espaciales presurizados junto al maestro Lucien en un transporte.

 

- ¡Zayne despiértate! ¡Ya casi llegamos! Pidió vociferando algo Gharn a su camarada castaño al ver sus ojos cerrados.

 

- No estoy dormido. Solo trato de no mirar. Aclaro Carrick algo preocupado por la prueba de hoy.

 

- Sí, creo que no podría dormir con todo este barullo alrededor nuestro. ¡Parece que el maestro Feln intenta limpiar el cinturón de asteroides a las malas! Bromeo Shad sabiendo a dónde se dirigirán, sabiendo un poco el riesgo.

 

- Estamos en posición, padawans. Este es su desafío final como aprendices, ustedes saben la misión. Confíen en la fuerza para qué los guie. ¡Pónganse Los cascos! Expuso y ordenó el rubio a los aprendices mientras estos hacían lo que él decía.

 

- El miedo es su enemigo. No le den espacio para crecer. Sean fuertes, Sean jedis. Explico y volvió a ordenar Draay a los jóvenes que estaban listos para salir al espacio.

 

Los padawans fueron por la esclusa y salieron al campo de asteroides.

 

Devuelta al presente en la baja ciudad de Taris, el hogar de las clases desfavorecidas de este mundo. Esto era particularmente cierto para los residentes no humanos que, debido al sentimiento anti-alienígena dominante, gobernado por bandas criminales, mercenarios, cazarrecompensas, contrabandistas y traficantes, habitado por pobres y marginados, en los niveles superiores e inferiores abundaban los barrios marginales con calles. llenas de suciedad y basura.

 

Zayne dormía en una carreta de basura movida por un gran reptil cuadrúpedo que tenían por jinete a un par de wookies, el jedi iba en una avenida iluminada por luces de tiendas, lámparas y demás fuentes de luz, algo concurrida por muchos alienígenas no humanos de todos los tipos, algo intento interrumpir el descanso del joven jedi y eso fue las palabras de su camarada contrabandista.

 

- Jedi Interno despierta. Vocifero Marn mientras le lanzaba un pequeño saco con comida para ver si despertaba y lo logro al ver como abrió los ojos, quien vio a Gryph sentando en la basura como él-

 

- ¡Ven algo! Ordeno en tono de broma el Snivviano mientras agitaba sus manos para llamar la atención de su amigo.

 

- ¿Dónde estamos? Consulta Carrick observando los alrededores de donde estaba, viendo la metrópolis decadente mientras agarraba el saquito y empezó a comer lo que le dio su camarada.

 

- Aún estamos en la ciudad baja. ¿No puedes olerlo? Hoy, un poco más entretenida de lo habitual, Algo movida. Notificaba el de ropas moradas con algo de humor mientras divisaba a tanta gente a sus alrededores.

 

- ¿Hemos estado aquí mucho tiempo? Pregunto el castaño de cuanto paso mientras dormía.

 

-¿Cuanto tiempo? ¡Tendré que sentarme en un recipiente de Kolto cuando esto haya terminado! Aseguro con su típico tono burlón el traficante mientras veía a su amigo con sonrisa.

 

-¡GRYYARGH! Interrumpió uno de los wookies jinetes anunciando que ya han llegado donde querían ir.

(Los wookiees, una especie de seres peludos e imponentes, peludos y sensibles de cuerpo humanoide, bípedos, con cabeza, torso y cuatro extremidades, eran altos, sus extremidades superiores terminaban con manos con cuatro dedos)

 

- Esta es nuestra parada. Ve por un costado, gran mancha— Y sé discreto, muchas pandillas de atacantes se reúnen en los alrededores. Informa Hierogryph a su mientras aliado este último iba bajando de la carreta.

 

- De acuerdo, pero me gustaría que tú. Pero no termino de declarar el joven jedi lo que quería decirle a su camarada porque fue interrumpido mientras veía como Marn bajaba del vehículo.

 

Zayne fue interceptado por unos maleantes uno de ellos le hablo

 

- ¿Y dónde piensas que vas? Pregunto Wargo un droviano (los drovianos eran bípedos, inteligentes, con un físico corpulento y pesado. pesaban el doble que un humano y con una media de dos metros. su torso tenían dos patas gruesas, similar a troncos, cada miembro de su cuerpo ya sea sus brazos o piernas eran como tentáculos extremadamente fuertes y terminaba en tres pinzas articuladas y afiladas) vestido con una armadura ligera mientras el jedi era acorralado por un Zabrak rojo conocido como Frazznik que agarro al jedi y lo amenazo con una daga (Los zabraks eran casi humanos, ya que tenían una serie de características físicas que los diferenciaban, siendo la más llamativa de ellas una serie de cuernos que coronaban las cabezas en ambos sexos. Los cuernos crecían en patrones variados según la subespecie Las diversas subespecies de zabraks también pudieron identificarse por los patrones en los que crecían sus cuernos)

 

- ¿De visita citadino?, ¿bajaste a visitar la escoria? Pregunto con ironía el zabrak mientras seguía sosteniendo al fugitivo mientras sostenía su arma.

 

 

- Espera. ¡Tú eres el pequeño tipo que sale en los anuncios! Afirmo el droviano mientras extendía sus manos con intención de capturar a Carrick.

 

- Estás a punto de alegrarme el mes, pequeño. Gracias por venir directo a nuestras manos. Bromeo Frazznik con una leve sonrisa mientras seguía reteniendo su presa.

 

- ¡El snivviano, también! ¡Tiene recompensa! Exclamo emocionado el otro droviano mientras sostenía a Hierogryph con una gran sonrisa alegre.

 

- "Nuestra parada" ¿Eh? Bromeo sarcástico el castaño a su compañero con una sonrisa amargada mientras lo veía.

 

- Lo siento por la gramática wookie. Yo hablo mejor el "idiota" ¡Déjame manejar esto! Se burló el traficante como siempre mientras pensaba en como salir de esta situación.

 

- Un momento. Amigo. Veo quién son – ustedes están con los Vulkans, ¿Los muchachos de Benno quizás? Consulta Marn mientras notaba las vestimentas típicas de esa pandilla.

 

- ¿Que si somos aperitivo? Pregunto apuntando su cuchillo, el zabrak rojo a su cautivo contrabandista.

 

- Benno odia esperar. El pego de una recompensa del aguacil significa burocracia, autorizaciones, retraso. Y pueden hacerle ir a la ciudad alta para testificar. ¡Solo imaginalo Benno, a la ciudad alta! Expuso el Snivviano la situación en la que se encontraban sus captores si querían el pago por ambos fugitivos.

 

- Hrrmm, A Benno no le gusta llevar ropa de la ciudad. Dudo preocupado, Frazznik pensando en lo complicado y difícil que se ponía la situación por la recompensa.

 

- ¡Y eso será cada semana! Y todo en lo que él pensaba es en los tipos que lo llevaron allí. Siguió exponiendo a Marn a sus captores sobre los trámites que deben realizar por la captura de ambos.

 

- Al jefe no le gusta esa idea. Aseguro el zabrak mientras titubea de su decisión viendo todo lo que tendría que realizar para tener su pago por el par de fugitivos.

 

-Bien. Pueden impedir que eso pase. Hay una manera más fácil de hacer su gran negocio por todo el año, si me escuchan claro. Aseguro el Snivviano mientras les iba a hacer una proposición a sus captores.

 

Zayne logro separarse un poco de los matones y su amigo, los cuales hablaron sin que el castaño oyera nada más que murmullos

 

De un momento a otro la carreta de los Wookies fue asaltada por los matones

 

- ¡Corre chico! Grito Marn ordenando a su camarada que salieran de ahí.

 

- ¿Qué les dijiste? Indago Zayne dudoso de lo que dialogaba su compañero con sus adversarios mientras seguía desplazándose.

 

- ¡Les dije que los wookies habían escondido especialmente entre sus cosas! Respondió el Snivviano sin vergüenza alguna mientras seguía corriendo.

 

- ¿Por qué hiciste eso? ¡Ellos nos ayudaron! Dudo, indignado y algo enojado, el joven jedi mientras seguía moviéndose.

 

– Y nosotros los estamos ayudando a tener unos bonitos vehículos una vez que acaben con esos tipos. Aseguro Gryph con un poco de ironía mientras era seguido por el padawan.

 

- Vámonos. El lugar al que vamos está al otro lado de este basurero. Indico el de ropas moradas mientras seguía moviéndose.

 

- Espera. ¡Pensé que habías dicho que estábamos debajo de la ciudad! Dudo el castaño de las palabras de su compañero prófugo.

 

- Quita el cabello de tus orejas. Dije que íbamos a ir debajo de la ciudad. No, que estábamos dentro. No con la plaga y los rakghouls allí abajo. Específico el contrabandista despejando las dudas de su camarada.

 

- Mientras tú tenías tu sueño de belleza, yo salte fuera, para conseguir unos créditos, e ir dejando un sendero, directo a la entrada. Explico Gryph con su clásico tono de burla mientras seguía su camino.

 

- Entonces nosotros vamos directo al pasado. Afirmo el de ropas moradas, seguro de las palabras del joven prófugo.

 

- ¿Cuándo ibas a decirme esto? Consulta a Carrick con algunas dudas en su cabeza.

 

- Cuando lo lográramos de seguro evitamos una buena persecución. El alguacil es muy listo como para enviar a alguien allí abajo, sin embargo, imagino que tus maestros son aún más listos, ¿verdad? Expuso Hierogryph pensando en lo que harían sus adversarios en su persecución.

 

Mientras tanto en el nivel más abajo de la ciudad baja se veía a los cuatro maestros, Lucien Draay, Q'Anilia, Raana Tey, Feln luchaban contra los Rakghouls (Los Rakghouls eran mutantes de un virus del talisman Muur, de apariencia musculosa, humanoide , poseían de dos a tres ojos, tenían gruesas garras en manos y pies) que se abalanzaban por montones hacia ellos mientras los jedis con los sables en alto acaban con ellos

 

- ¡Q'anillia te necesito acércate! Exigió el ex-maestro de Zayne a su camarada mientras él peleaba con los infectados.

 

- ¡Dijiste que los viste debajo de la ciudad! Exclamo molesto el rubio a su amiga miraluka mientras ambos seguían luchando con espadas en alto.

 

- Pero no fue el futuro lo que vimos, Lucien. Fue un destello que cogimos de Zayne y algo que dijo el Snivviano. Explico Q'Anilia confundida por su fallo en su visión de la fuerza.

 

- El destino se ha nublado desde que él se involucró. Este Gryph puede ser el punto de ruptura. Aseguro la Miraluka mientras seguía luchando contra las abominaciones.

 

- Y tú no puedes leerlo. Maravilloso. Se burló el rubio con ironía viendo como su camarada se equivocó mientras un rakghoul se le abalanzaba encima, pero él lanzó una estocada de su sable en 90 grados, cortando a la criatura a la mitad.

 

- Pero hemos acertado en una cosa. Tenías razón, él abandonará a Zayne por nosotros. Afirmo la miraluka a su camarada Draay con seguridad.

 

De repente sonó el comunicador de Lucien.

 

- No tengo que ser un vidente del círculo para saber eso. Bromeo otra vez a su compañera mientras sostenía el comunicador el cual atendió y pudo ver al maestro Xamar

 

- ¡Xamar! ¿Qué noticias hay? Consulte al jedi de túnica blanca observando el holograma de su compañero.

 

- ¡Han llamado de nuevo de Coruscant, Lucien! Ellos quieren saber. Notifico el Khil con su típico acento al humano.

 

¡No importa! ¡La república! ¡Que hay de la república! Exigió el rubio, algo nervioso y queriendo saber más de lo que le informó a Xamar.

 

- Toda la seguridad de Taris está ahora en la búsqueda. El alguacil ha informado nuevos avistamientos en la ciudad baja, fuera de los refugios de la villa de máquinas. Explico Khil informando de la situación de las fuerzas del orden.

 

- ¡Eso es! ¡Ellos están allí! Aseguro la miraluka dándose cuenta de la ubicación de los prófugos.

 

- ¡Dile al alguacil! Que cierre el cerco Xamar. ¡Vamos para allá! Ordeno Draay a su compañero a través del holograma mientras se dirigía a donde debía ir.

 

Mientras con los prófugos en otra parte llegaron a una zona donde podía ver el exterior, lo cual el padawan noto

 

- ¿Qué es este lugar? ¡Casi puedo ver el cielo desde aquí! Noto el castaño observando parte del exterior sin techo.

 

- ¿Bonito, no es así? Había un grupo de elevadas torres aquí, alguien las demolió para hacer sitio para algo más. Pero se olvidaron de ponerlo. Ahora solo es un cruce. Explico el contexto del lugar, el de ropas moradas mientras miraba igualmente que su camarada.

 

- ¡Está sucio! Observa a Zayne mirando los desperdicios a sus alrededores.

 

- ¿Dónde piensas que va tu basura? ¿A la órbita? La ciudad alta no lo es tanto ¡No todavía! Bromeo Gryph sarcástico mientras sacaba un pequeño cuchillo.

 

- Pero hablando de tirar las cosas. Quítate la trenza. Exigió el Snivviano mientras se acercaba a él.

 

- No lo creo. ¡Puedes venderla cuando quieras, pero es demasiado pronto, Gryph! Dudo el padawan sobre la propuesta de su camarada, pensando que era por un motivo económico.

 

- No es por eso. Aunque gracias por pensar en mí. ¡No quiero ponerte la capucha cada vez que se te caiga! Insistió el traficante burlonamente dando sus razones para lo que quería hacer,

 

- ¡Pero todavía soy un padawan! ¡Lo que sea que les paso a mis amigos, tenemos que solucionarlo! Necesito esto. Cuestiono Zayne dudando si cortar su trenza mientras tomaba el cuchillo y la observaba.

 

-Muy bien. Pero el cabello te crecerá de nuevo, pero no te crecerá otra cabeza. Argumento el de ropas moradas dando las razones por las que debería cortarse la trenza.

 

El padawan finalmente accedió y se cortó la trenza.

 

- No te sientes mejor ahora sin. Pregunto Hierogryph algo burlón a su compañero, pero no pudo terminar de hablar porque Carrick lo interrumpió.

 

 

- Cállate. Solo muéstrame a donde vamos. Concluyo algo enojado, el jedi prófugo de forma cortante lo que acaba de hacer.

 

Ambos fugitivos fueron hasta un par de torres de desperdicios metálicos donde Marn se puso entre ambas y pudo observar que estaban en el lugar cerca de donde querían ir.

 

- Estamos aquí. De hecho, por aquí se encuentra "el último recurso" Literalmente hogar de alguien que ha sido útil para mí antes, veamos si él está. Pero no pudo terminar de dialogar lo que quería decir por qué empezaron a derrumbarse las torres y el padawan grito.

 

- ¡Cuidado Gryph! Advirtió Carrick mientras apartaba del derrumbe a su amigo salvándolo de la lluvia de escombros.

 

Algo aturdidos terminaron una salva, pero a lo lejos una figura se acercaba con arma en mano

 

- ¿Qué? ¡Esta trampa no debería estar puesta! Se cuestionó el contrabandista por la extraña situación en la que estaba.

 

- ¿Y por quién fue puesta? Se le preguntó al castaño con dudas de quién pudo haberlo hecho y por qué.

 

- ¡Por mí! Exclamo una chica de piel blanca como la nieve, de cabello blanco largo, vestida un vestido blanco, armada con un bastón de choque, la fémina era una mestiza de Sephi y Arkaniana. como algunos más pequeños y con sobrepeso. Aunque muchas la piel pálida y de tonos violeta, otros tenían tonos de piel como los humanos. Su pelo largo y liso eran de color como el negro, el rubio, el gris y el blanco. Carrick dejándolo contra el suelo

 

El padawan encendió su sable de luz e intentó chocar su arma contra la de su adversaria, pero esta la esquivo y activo la función de aturdimiento de un extremo de su arma que se prendió de un azul brillante que uso contra el fugitivo en su hombro rompiendo. en parte su atuendo dejándolo dejando desorientado por un momento haciendo que soltara su arma jedi y procedió a golpearlo con el otro extremo de su arma.

 

- ¡Jarael no es necesario luchar! ¡Él está conmigo! ¿Soy Marn Hierogryph, me recuerdas? Consulta el Snivviano algo preocupado por la actitud agresiva de su vieja conocida.

 

- ¡Sé quién eres y sé quién es él! ¡Tú estás en problemas y tú estás escapando! Señalo la arkaniana con su arma en alto entre ambas manos algo desconfiada.

 

- ¿¡Qué me hiciste!? ¡No puedo sentir mi brazo! Dudo algo indignado el castaño mientras aún se sostenía el hombro extrañado por el efecto del arma en él.

 

- Una pica neural, la sensibilidad regresará en una hora. ¡Estarás en alguna otra parte para entonces! Explico y bromeo la híbrida aún algo sería viendo con desagrado a su par de invitados nada agradables para ella.

 

- Tú ganas, Jarael. Esconde los colmillos. Nos iremos inmediatamente después de que veamos al acampador. Pidió Marn confesando sus intenciones a su vieja conocida.

 

- ¡No van a ver a nadie, váyanse ahora! Exigió vociferando, la sephi algo más irritada como enojada aún con su arma en alto.

 

- Gran plan, Gryph. ¡Hubiera sido mejor ir a unos de los edificios que están en llamas! Bromeo con sarcasmo Carrick pareciendo mejor opción lo dicho por él en tono de burla.

 

- ¿Por qué no? ¡Para empezar tú eres la razón por la que están en llamas! Se burló Jarael vociferando enojada por lo que creía que había causado el padawan aquí presente.

 

- ¡No juegues tonto! ¿No has visto holonet hoy? Pregunto la arkaniana para ver si el inculpado joven sabia sobre las noticias actuales.

 

- No, desde anoche. Era tanto como verme en un espejo. Se quejó Zayne sin saber lo que decían las noticias sobre él.

 

- Gracioso. ¡No fue tan divertido cuando los comerciantes supieron que habías matado a una clase completa de futuros jedi y venías para acá! Aseguro vociferando con sarcasmo la albina informando de la situación que había causado Zayne.

 

- ¡Yo no amigo a nadie! Reclamo el castaño mientras refunfuñaba por las acusaciones de su nueva conocida.

 

- No me preocupa. Ellos están bien muertos. ¡Y así también esta Taris! Las industrias Lhosan acaban de anunciar que están retirando todas sus operaciones a otro mundo a un lugar más seguro. ¡Simplemente, ha arruinado a la mitad de las personas decentes en la ciudad baja! Notifico e informo la mestiza vociferando todo lo que provoca el padawan y sus supuestas acciones, mientras ella señalaba con su mano las patrullas en las lejanías, desplazándose en los cielos con sus luces, iluminando los suelos y edificios en busca del fugitivo.

 

- ¿Entonces todo esto? Dudo el padawan observando las muchas patrullas que lo buscaban.

 

- Tú lo has hecho. Y cuan poca seguridad tenemos todos aquí con ellos, persiguiéndote así que vete antes de que nos entregues. Exigió Jarael mientras declaraba la situación en la que se encontraban los suyos, por lo que había provocado a Zayne.

 

- ¡Oigan llego el sujeto que estaba buscando! Aseguro Marn visualizando a un anciano arkaniano de cabello, bigote y barba canosos, vestido de gabardina parchada y desgastada, llevaba un gorro de cuero en su cabeza y tenía unos binoculares que colgaban de su pecho, su nombre era Gorman Vandrayk, pero su apodo era Acampador.

 

El viejo llevaba un carrito de supermercado deslizador lleno de droides y aparatos usados ​​​​mientras estaba acompañado por pequeños droides funcionales.

 

- Redirecciona el voltaje alrededor del bus principal… No sé por qué me hacen subir el voltaje… Luego bajarlo, eso dicen… No sé… Por qué este es mi trabajo… Mi trabajo es mantener activo el cátodo de cristal… No sé por qué ese es mi trabajo… Divagó el arkaniano quejándose mientras seguía avanzando con su carrito cerca de los prófugos y de Jarael.

 

- ¡Acampador, soy El Gryph! ¡Necesito que prepares uno de mis tus cargamentos especiales para dos! Solicito el de ropas moradas amablemente al Arkaniano un medio de escape de este mundo.

 

- ¡No parece que él pueda preparar un refrigerio! Exclamo Zayne burlándose un poco del anciano, observando que su estado mental no era muy cuerdo o coherente.

 

- Siempre me buscan para activar el sistema… No mantener activo el sistema, no necesitarán cambiarlo, no mientras haya energía para… Siguió divagando gruñón el viejo mientras seguía su camino.

 

- Vamos acampador, ¿usted trabajó el compartimiento de Mendu para mí, recuerda? Argumento Marn Intentando hacerle recordar al arkaniano el encargo que le hizo hacer el contrabandista.

 

- ¿Mendu? ¿Zovio Mendú? El maestro Feln intenta atraparlo el mes pasado. Desapareció, o algo así. Dudo el padawan pensando en que paso exactamente con ese fugitivo sin saber su paradero.

 

- ¿O algo así? ¡Yo fui quien lo envió a Corelia como una canasta de pescado seco Dreeka! Presumió Hierogryph con su clásico tono burlón explicando qué paso con el maleante que desapareció.

 

- El acampador acondiciona vainas de escape viejas en contendores de envío. Tú nunca sabrías qué hay adentro. Explico Gryph la labor del anciano aquí presente y porque lo necesitaban.

 

- Reparar, pero Yo… Yo… Continuo divagando el arkaniano mientras seguía caminando.

 

- Perero, soy Jarael, necesitas buscar adentro. Deja eso. No pudo terminar su diálogo la joven arkaniana, porque el viejo logro volver a ver el mundo real saliendo de sus pensamientos.

 

-¿Gryph? ¿Marn Hierogryph? ¡Desaparece! Declaro el anciano algo molesto, como enojado de su invitado indeseable por asuntos pasados ​​con el mientras subía por una rampa a su hogar.

 

- ¿Oh, ahora, no te pague? He estado queriendo encontrarte para hacerlo cuando vi en mi droide de contabilidad, puedes hacer esto después que. Intento explicar la situación al Snivviano, pero fue interrumpido por el anciano.

 

- ¡No tengo tiempo para ti, hocicos! ¡Ya conseguí los equipos que necesito justamente aquí, si aquí! Concluyo el viejo mientras entraba en su hogar en el cual se veía una mesa grande y extensa con piezas, aparatos de todo tipo, puso parte del contenido del carrito en la mesa y lo examinaba mientras el contrabandista lo seguía.

 

- Eres un hombre ofendido. Puedo arreglar eso. Solo queremos. Pidió Hierogryph amablemente al arkaniano intentando explicar sus motivaciones, pero fue interrumpido por el mismo.

 

- ¿Quieres? Te doy lo que tú quieres. Después tengo que darles lo que ellos quieren. ¡Todos queremos! ¡Bien, quiero terminar el redireccionamiento de este tri-relevador, mientras todavía recuerdo cómo! Reflexiono el anciano mientras manipulaba las piezas que tenía al frente suyo decidido a terminar su trabajo.

 

Mientras con el castaño y la híbrida, al padawan se le estaba acabando la paciencia

 

- ¡Estamos perdiendo el tiempo aquí! ¡Gryph! ¡La idea de este tipo de un escudo de radiación seguramente es un buen sombrero y una sonrisa inocente! ¡No me asombra que necesite de Darth sol aquí como justiciero! Afirmo Carrick mientras se burlaba de la posible poca cordura del anciano al ver como divagaba y su mente incoherente.

 

- ¿Quieres que te duerma algo más? ¡Tú y tu diminuto amigo se van de aquí, ahora! Respondió algo ofendida Jarael de forma sarcástica de como se refería a su camarada arkaniano, el padawan.

 

- ¿Cuál es tu problema? ¿Tú no quieres la recompensa? ¡Todos los demás quieren un pedazo de mí! Declaro vociferando Zyane enojado a la chica por su situación tan delicada como terrible en la que se encontró.

 

- ¿Crees que es sencillo para nosotros? Bien, no eres el único. Notifico su situación, la hibrida mientras veía con ojos furiosos al chico, pero de un momento a otro pudo escuchar los sonidos de aeronaves cerca de ellos y pudieron ver luces que eran los faros de las mismas.

 

Ambos voltearon y pudieron contemplar un vehículo volador alargado y grueso con un rotor con hélices de cada lado del navío en parte de popa, la nave abrió sus compuertas rectangulares mostrando a los maestros jedis que buscaban al inculpado padawan junto a varias motocicletas deslizadoras de la policía. , un altavoz resonó en el crucero.

 

-¡Zayne Carrick! ¡Este es el alguacil de Taris! ¡Ríndete o abriremos fuego! Advirtió la figura de autoridad mientras se acercaba la nave a la posición del prófugo.

 

- ¿Zayne? Soy el maestro Lucien. No tiene que ser así, Zayne, ¡El alguacil ha estado de acuerdo en que vuelvas con nosotros a la orden! Ordeno el rubio amablemente intentando hacer razonar a su padawan, pero este último sabía que no tendría un buen final con Lucien.

 

El castaño y la mestiza corrieron hacia la rampa, Jarael pone su bastón cerca de las piernas del padawan.

 

- ¿Qué haces? Consulta molesto, Zayne viendo como le impedía un poco el paso con su arma.

 

- ¡Sal o quédate, pero aléjate de mi camino! Respondió algo asertiva la Sephi mientras seguía subiendo la rampa.

 

- ¿El campador? Él subió a ese ático por alguna razón. Afirmo Marn dudoso mientras señalaba con el dedo por donde se era el anciano.

 

- ¡Perero, nos han encontrado! ¡Llego la hora! Pidió vociferando la mestiza a su divagante camarada.

 

- Por cierto, esto no es un ático. Reclamo Jarael se sentaba en una consola con silla.

 

- El Último Recurso no es un basurero hocicos. ¡Es un transporte de basura! Respondió el viejo al contrabandista mientras hacía mientras encendía y hacía despegar la nave sorprendiendo a los maestros jedis y guardias de seguridad por igual.

 

El navío de los fugitivos despego y la maestra Raana Tey logro agarrarse de la misma

 

- ¿Qué estás esperando? ¡Tras ellos! Exigió el maestro rubio viendo que no perseguían a los fugitivos.

 

- ¡Maestro Lucien Este crucero no es apto para el espacio! Aclaro el oficial al jedi viendo como se iban los prófugos.

 

La togruta lamentablemente se soltó y cayó justo donde estaba el crucero de seguridad

 

 

- ¡Regrese a su templo! ¡Nuestras patrullas orbitales los atraparán! Aclaro el oficial de la ley intentando hacer razonar al maestro y haciéndole sentir que está todo bajo control.

 

- No alguacil. Esta vez seguirán nuestras órdenes, este chico es problema de los jedis. Ordeno y exigió rubio autoritariamente dando a entender que quería tener el asunto en sus propias manos.

 

Mientras el crucero logro despegar y llegar al espacio

 

- ¿Ahora estás feliz? ¡Los cruceros patrulla, vienen en camino! Reclamo la mestiza con sarcasmo y preocupación por la situación en la que se han metido.

 

- ¿Qué es esta cosa? ¿Dónde están los escudos? ¿Y la computadora de navegación? Consulta el padawan lleno de dudas de como funcionaba la nave.

 

 

- Presiona ese botón rojo. Ahora recuerdo los saque para redireccionarlos a través de mi nueva consola allí. Pidió amable el anciano al joven jedi para que hiciera que los sistemas funcionaran como deberían.

 

Pero sin previo aviso se escucharon sonidos eléctricos y el navío espacial se apagó

 

- O puede ser que los vendí y no lo recuerdo. Afirmo confundido el anciano camarada de la mestiza mientras pensaba en como solucionar el apagón de su vehículo a la deriva del espacio.

 

- El fin -

 

 

 

 

 

 

More Chapters