En el corazón de la China rural, hace mucho tiempo, un joven llamado Liu Wei, conocido como el Prodigio Verde, se reencarnó. Lo había visto todo en su vida pasada: los clichés, los protagonistas superpoderosos, los sistemas de harén. Pero esta vez, era diferente. Tenía un sistema, un sistema muy cliché, diseñado para ayudarle a adquirir tecnologías oscuras y convertirse en el prodigio definitivo.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Otro sistema cliché. Genial. Pero esta vez, lo haré funcionar. Y tal vez, solo tal vez, pueda encontrar la manera de disfrutar de las ventajas de esta vida rural.
La reencarnación de Liu Wei lo había devuelto a su juventud, a una época en la que la vida era sencilla y los deseos puros. O eso creía. Su corazón latía con fuerza mientras observaba su humilde hogar, y sus ojos se posaron en la tímida chica que había sido su vecina y su amor secreto: Mei Li.
Mei Li era todo lo que recordaba y mucho más. Su timidez, sus suaves curvas y su carácter amable le conmovían. Pero en su vida pasada, no la había tratado bien. Había sido arrogante, desdeñoso y solo se había centrado en sus propias ambiciones. Esta vez, estaba decidido a enmendar sus errores y disfrutar de los placeres sencillos de la vida.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Mei Li. Es aún más hermosa de lo que recuerdo. Y es mía. Esta vez, haré lo correcto. La haré feliz, y tal vez, solo tal vez, pueda encontrar la manera de disfrutar de su compañía mientras estudio.
El sistema de Liu Wei, el Sistema Prodigio Verde, cobró vida, presentándole su primera misión: estudiar y adquirir conocimiento. Pero Liu Wei tenía otros planes. Miró a Mei Li, con las mejillas sonrojadas de vergüenza, mientras ella lo ayudaba a preparar su área de estudio. Su naturaleza tímida la hacía aún más atractiva, y no pudo evitar sentir una oleada de deseo.
[Pensamiento interno de Mei Li]: Wei, me mira diferente. Hay un anhelo en sus ojos que nunca antes había visto. Pero confío en él. Siempre lo he hecho. Y si esto es lo que quiere, se lo daré.
Mientras Liu Wei comenzaba a estudiar, sus ojos se sintieron atraídos por las curvas de Mei Li, cuyos glúteos se redondeaban a la perfección bajo su modesta ropa. Sintió una oleada de motivación; su deseo de aprender se avivaba por el deseo que sentía por ella. La observó moverse por la habitación, con su cuerpo balanceándose suavemente, sus glúteos tentándolo a cada paso.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Esto es perfecto. Puedo estudiarla y disfrutarla al mismo tiempo. Mei Li, mi tímida belleza, eres mi inspiración.
Mei Li, al percibir su mirada, se sonrojó profundamente, pero continuó con sus tareas, con el corazón agitado por una mezcla de vergüenza y emoción. Podía sentir su deseo, su hambre, y eso la asustaba y la excitaba a la vez. Sabía que esta vez era diferente, que realmente la quería y que estaba dispuesta a hacer lo que fuera para hacerlo feliz.
[Pensamiento interno de Mei Li]: Él me desea. Lo presiento. Y yo también lo deseo. Pero esto es tan nuevo, tan diferente. Tendré que acostumbrarme. Por él.
A medida que los días se convertían en semanas, las sesiones de estudio de Liu Wei se intensificaban, y su deseo por Mei Li crecía cada día. La observaba moverse por la habitación, con su cuerpo balanceándose suavemente, sus glúteos tentándolo a cada paso. Y mientras estudiaba, la imaginaba en sus brazos, su cuerpo apretado contra el suyo, sus suaves gemidos llenando el aire.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Mei Li, mi tímida belleza, eres mi motivación. Contigo a mi lado, puedo conquistarlo todo.
Mientras tanto, a Mei Li le costaba adaptarse al nuevo deseo de Liu Wei. Era tímida, inocente e insegura de cómo manejar sus insinuaciones. Pero lo amaba y estaba dispuesta a hacer lo que fuera para complacerlo. Empezó a vestirse de forma más provocativa, con la ropa ceñida a sus curvas y sus glúteos redondeándose a la perfección bajo la fina tela.
[Pensamiento interno de Mei Li]: Él me quiere así. Y si esto es lo que lo hace feliz, lo haré. Por él.
El pueblo empezó a susurrar sobre Liu Wei y Mei Li, y sus deseos refutados se convirtieron en la comidilla del pueblo. Pero Liu Wei y Mei Li guardaron sus secretos, su amor oculto tras puertas cerradas. Y mientras Liu Wei estudiaba, su deseo por Mei Li crecía cada día, supo que había encontrado su verdadero propósito: estudiar, aprender y disfrutar de los placeres sencillos de la vida con la mujer que amaba.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Mei Li, mi tímida belleza, eres mi mundo. Y haré lo que sea para mantenerte a mi lado.
Al entrar el tío de Liu Wei en la habitación, su mirada se posó en Mei Li, su cuerpo pegado a la cama, sus glúteos perfectamente curvados bajo la fina ropa. Sintió una oleada de deseo, su ansia por ella creciendo a cada segundo. Se acercó a ella, recorriendo su cuerpo con las manos, sus labios presionando los de ella.
[Pensamiento interno del tío]: Es mía. Esta noche, conocerá el placer de un hombre de verdad.
Mei Li, atrapada en un torbellino de sensaciones, gimió suavemente, arqueando su cuerpo para encontrarse con el de él. Podía sentir su deseo, su hambre, y eso la asustaba y la excitaba a la vez. Sabía que era suya, que le pertenecía, y estaba dispuesta a todo para hacerlo feliz.
[Pensamiento interno de Mei Li]: Él me desea. Y yo lo deseo. Esto está mal, pero se siente tan bien. Haría lo que fuera por él.
Mientras Liu Wei estudiaba, sus ojos se sintieron atraídos por la escena que se desarrollaba ante él. Observó cómo su tío reclamaba a Mei Li, recorriendo su cuerpo con las manos, presionando sus labios contra los de ella. Y mientras observaba, sintió una oleada de motivación; su deseo de aprender se vio impulsado por su deseo por ella.
[Pensamiento interno de Liu Wei]: Esto es perfecto. Puedo estudiarla y disfrutarla al mismo tiempo. Mei Li, mi tímida belleza, eres mi inspiración. Y tío, eres mi cómplice involuntario.