"Admito que esos no fueron mis mejores años, pero no era tan mala" - dijo Sakura mientras le daba una mirada en blanco e intentaba calmar a su hija - "¿Verdad, mamá?"
"Lo siento, hija, pero lo eras" - respondió Mebuki mientras negaba con la cabeza - "Tus gritos eran tan fuertes que podían escucharse hasta en Kumogakure no Sato, no sabes cuántas veces me preguntaron si podía enviarte a una escuela de ópera..."
Sakura intentó defenderse, pero la mirada seria de su madre le dijo todo lo que necesitaba - "Tch, ok, admito que era terrible, pero no creo que sea tan mala como mi hija"
Y como si quisiera confirmar las palabras de su madre, Sarada empezó a llorar más fuerte.
"Ugh, no sé por qué está tan enojada" - dijo Sakura con el ceño fruncido - "Le cambié el pañal, y le di de comer"
"No creo que sea suficiente" - respondió Kurama mientras negaba con la cabeza.
Marcas negras empezaron a salir del rostro de Sakura porque sabía de qué estaba hablando, lo que le causó que su furia creciera de golpe.
"Kurama, eso no fue de buena educación, además, eso es acoso sexual" - dijo Mikoto mientras negaba con la cabeza, solo para pensar unos segundos - "¿Crees que Naruto pueda ayudarnos?"
"¿Naruto?" - repitió Kurama con el ceño fruncido porque eso no tenía sentido - "¿Por qué?"
"Puede que no lo sepas, pero Naruto tiene un talento natural para caerle bien a la gente, tal vez con eso podamos ayudar a Sarada-chan a calmarse" - respondió Mikoto con una pequeña sonrisa.
Kurama asintió en silencio antes de desaparecer, solo para aparecer junto a su hijo mayor.
"¿Por qué me trajiste a la casa de Sakura Nee-chan?" - preguntó Naruto, quien había aprendido a no llamar Obasan a la joven de cabello rosado.
Sorprendentemente, la propuesta de Mikoto pareció funcionar, porque a penas la bebé sintió la presencia de Naruto, no solo se calmó, sino que también empezó a reír felizmente, incluso estaba moviendo sus manos en dirección del niño de cabello rojo.
"¿Papá?" - dijo Naruto, confundido con la situación.
"Esto es interesante" - murmuró Mikoto mientras sus ojos se entrecerraban porque era obvio que su nieta estaba más que feliz de estar cerca de su 'sobrino'.
Kurama lentamente movió a su hijo fuera de la habitación, solo para que la bebé de Sasuke empezara a llorar nuevamente - ". . ."
Luego de eso, Naruto nuevamente entró a la habitación, haciendo que la bebé volviera a reír, una escena que se repitió unas cinco veces más antes de que Sakura le diera otro golpe al hígado al patriarca del clan Uzumaki - "¡Deja de tratar a mi hija como si fuera un conejillo de indias!"
"Ugh..." - Kurama simplemente soltó otro gemido de dolor mientras que Mikoto negaba con la cabeza.
"Carga a la bebé, Naruto-chan" - dijo Mikoto con una sonrisa en su rostro.
Naruto, todavía confundido, siguió las órdenes de su segunda madre, solo para fruncir el ceño al sentir los pequeños dedos de Sarada en su rostro - "Mikoto Kaasan..."
"Tranquilo, ella solo está jugando" - sonrió Mikoto mientras sus ojos brillaban porque era obvio que la bebé estaba más cómoda de lo que a cualquiera dentro de la habitación quisiera admitir, al punto de que luego de unos minutos, ella volvió a dormir.
"No saben cuánto me costó hacerla dormir" - murmuró Sakura con una expresión molesta en su rostro - "Y Naruto-chan lo logró con solo estar a su lado, esto es injusto"
"Es obvio que Sarada está interesada en Naruto-chan" - dijo Mebuki mientras negaba con la cabeza - "Aunque no sé si esto es bueno o malo"
"Malo, porque a Sasuke no le gustará escuchar esto" - respondió Kurama con una expresión extraña en su rostro, o sea, no era como si pudiera culpar a su amigo, no cuando él (Kurama) se había acostado con su madre, y su hija (Sarada) estaba mostrando claros síntomas de conexión con su primogénito (Naruto).
"Tal vez solo estamos sobrepensando las cosas" - dijo Mikoto con una mirada en blanco en su rostro - "Sarada solo está recibiendo felizmente el aura que rodea el cuerpo de Naruto-chan, tal vez en el futuro los dos sean buenos amigos"
"No creo que eso sea solo amistad" - dijo Mebuki al notar cómo Sakura estaba tratando de tomar a su hija, pero esta, incluso dormida, estaba mostrando una fuerza increíble al agarrarse de la ropa de Naruto-
Mikoto simplemente guardó silencio porque ni siquiera ella creía sus palabras, y eso sin contar la personalidad que Sakura había mostrado en su infancia, mezclado con lo firmes de pensamientos que eran los miembros del clan Uchiha que estaban sobre la mesa - "Olviden lo que dije..."
"Solo hagamos que Naruto venga a Konoha de vez en cuando para calmar a Sarada-chan" - suspiró Sakura con una clara expresión de derrota, aunque por dentro ella estaba pensando en cómo contarle esto a su amado Sasuke-kun.
*****
"¿Qué sucede, Kushina?" - preguntó Tsume con curiosidad cuando notó cómo su amiga estaba frunciendo el ceño.
"Siento que me perdí de un evento importante en la vida de mi hijo" - respondió Kushina con el ceño fruncido, aunque rápidamente sacudió la cabeza - "Como sea, es mejor que terminemos con esto rápido, solo queda tu clan"
"Tranquila, todo está listo" - respondió Tsume con una mirada tranquila en su rostro - "Ya hablé con los ancianos, y solo nos llevaremos a unos cuantos miembros de la rama secundaria, dejaremos todo el poder militar en Konoha"
Las dos mujeres estaban caminando hacia una residencia alejada dentro del territorio del clan Inuzuka, aunque Tsume no parecía querer decir para qué estaban dirigiéndose en esta dirección.
"Es más de lo que pensé recibir" - respondió Kushina mientras las dos llegaban a lo que parecía ser un criadero - "¿Dónde estamos?"
"¿Sabes sobre el origen de los compañeros Ninken (perros ninja) del clan Inuzuka?" - preguntó Tsume con calma.
"Claro, son perros entrenados, mezclados con ancestros salvajes para tener la lealtad de un perro, y la fiereza de un lobo" - respondió Kushina con el ceño fruncido - "¿Verdad?"
"Básicamente" - asintió Tsume mientras entraba a la residencia - "Como dijiste, los ancestros de los Ninken de mi clan son perros entrenados y lobos que logramos capturar, es por eso que durante estos meses, he estado pensando... ¿Y si logramos crear una nueva raza para el clan Inuzuka de Uzushiogakure no Sato?"
Kushina simplemente respondió con silencio, aunque su expresión cambió cuando vio cómo llegaba a una especie de veterinaria, la cual estaban dos animales - "Esto es..."
"Honestamente, fue un accidente, pero uno bien recibido" - respondió Tsume con una enorme sonrisa - "Por los padres, puedes más o menos entender el resultado..."
"P-Pero... esto no tiene sentido, si bien los dos son caninos, no significa que puedan mezclar sus sangres" - dijo Kushina con el ceño fruncido al ver a un zorro macho junto a una perra, la cual obviamente estaba preñada - "¿A caso hay un error?"
"No, nuestros especialistas confirmaron que dentro de la perra hay un híbrido nuevo" - respondió Tsume con emoción porque esto traía cientos de nuevas ideas para los criadores del clan Inuzuka, nuevas ramas que podrían expandir las habilidades de los ninjas Inuzuka.
Kushina todavía no sabía cómo responder a las palabras de su amiga, porque este milagro estaba al nivel de lo que Orochimaru haría si no hubiera estado tan loco.
"Ahora, solo nos queda mantenernos atentos al desarrollo de la gestación, y revisar los estados de las crías cuando nazcan" - dijo Tsume con seriedad - "Pero puedo asegurarte de que si todo sale bien, entonces nosotros estaríamos ante una nueva especia, una que podría mezclar las habilidades de un Ninken actual, junto a la inteligencia y agilidad de un zorro"
Mientras las dos mujeres estaban viendo los resultados bizarros de esta unión, un ninja del clan Inuzuka pareció en la entrada del lugar.
"¿Qué sucede?" - preguntó Tsume con el ceño fruncido.
"La presa está lista para hablar con ustedes, Tsume-sama, Kushina-sana" - respondió el ninja antes de desaparecer del lugar.
Tsume simplemente se cruzó de brazos antes de asentir, porque aunque todo ya estaba listo, todavía había un pequeño sector del clan que estaba reacio a la idea de entregar este milagro a Uzushio - "Vamos, Kushina"
"Ok" - asintió Kushina con una expresión seria en su rostro.
*****
"Sabía que este día llegaría, pero no pensé que sería tan pronto" - dijo Hiashi mientras sentía cómo las lágrimas empezaban a acumularse sobre sus ojos, algo que sorprendió tanto a sus hijas, como a su sobrino - "Hinata-chan..."
"¡¿Por qué no puedo ir con Onee-chan?!" - exclamó Hanabi con molestia, ignorando la tristeza que su padre estaba sintiendo.
"Porque yo digo que no, y eso es definitivo" - respondió Hiashi mientras miraba a su hija menor - "Lo siento, pero eres demasiado joven"
"¡No soy una niña!" - exclamó Hanabi mientras salía corriendo y daba un fuerte golpe a la puerta.
Hiashi negó con la cabeza antes de mirar a su hija mayor - "Por favor, cuídala"
"¿Eh?" - Hinata se sorprendió cuando escuchó esto, porque no era algo que ella se esperaba - "¿Ok"
Hiashi no dijo nada más, no porque no quisiera, sino porque las palabras parecían quedarse atoradas en su garganta, así que luego de despedirse, él se fue junto a su sobrino porque todavía había cosas qué organizar.