"¿Oh? ¿Pero sí no es Yugao-chan?" - dijo una anciana con una enorme sonrisa al ver a la joven de cabello morado - "Ha pasado un buen tiempo desde que nos vimos por última vez"
"Lamento no haber podido venir a verlos antes" - respondió Yugao, quien estaba caminando por los barrios de Konoha ahora que Kurama le había dado el día libre, tiempo que ella quiso usar para poder hablar con algunas personas importantes para ella - "Yo..."
"No tienes que disculparte, Yugao-chan" - respondió un hombre anciano mientras negaba con la cabeza - "Entendemos lo mucho que sufriste con la muerte de Hayate botchan (joven maestro)"
Así es, estos dos ancianos eran los cuidadores de Hayate, los mismos que lo vieron crecer solo debido a que sus padres habían muerto durante la guerra, siendo el último sobreviviente de su ahora extinto clan.
"Aún así" - murmuró Yugao con pesar - "Ustedes son los que más sufrieron su muerte aparte de mí, él era como un hijo para ustedes..."
Los dos ancianos simplemente guardaron silencio mientras agachaban la cabeza, porque aunque no quisieran admitirlo, la muerte de Hayate todavía les dolía.
"Ven, entra, tenemos mucho de qué hablar" - dijo la anciana con una triste sonrisa.
"Ok" - murmuró Yugao mientras entraba al hogar de los dos ancianos.
Mientras Yugao se ponía al día con los dos honorables ancianos, Tsunami estaba teniendo el día más vergonzoso de su vida, porque justo en el momento donde había reunido el valor para pedirle una cita al profesor de su hijo, su padre había aparecido para molestarla.
"Ugh, que alguien me mate..." - murmuró Tsunami mientras se tapaba el rostro con sus manos.
Kurama la vio en silencio antes de negar con la cabeza, no porque se negara a la petición de cita de la madre de su estudiante, sino porque no sabía cómo reaccionar ante esta cómica situación.
"Bueno, si te hace sentir mejor, acepto ir a una cita contigo" - dijo Kurama mientras miraba a la mujer de cabello negro.
"¿En serio?" - preguntó Tsunami mientras levantaba la mirada con sorpresa, después de todo, no esperaba que él aceptara luego de esa situación incómoda.
"Por supuesto" - asintió Kurama con una sonrisa.
"¿Ves? Te dije que todo saldría bien" - intervino Tazuna con una enorme sonrisa mientras soltaba una carcajada - "Tendrías que haberlo hecho antes, o sea, estás demasiado grande para actuar como una niña de 12 años"
Kurama sintió un escalofrío cuando escuchó las palabras del constructor de puentes, así que rápidamente se retiró en silencio.
"¿Kurama?" - dijo Tazuna con sorpresa, solo para sentir cómo su espalda se congelaba por el sudor frío - "¿A caso hay una corriente de aire?"
"Padre..." - dijo Tsunami con una voz gélida mientras el cabello ocultaba sus ojos.
"¡Espera, Tsunami!" - exclamó Tazuna al comprender la situación - "¡No quise decir nada malo!"
"¡Muere!" - rugió Tsunami, solo para que el grito de dolor de su padre se escuchara pocos segundos después.
Kurama, quien estaba en un lugar seguro, simplemente negó con la cabeza, pensando en cómo se había ganado el castigo el viejo constructor de puentes, solo para regresar a trabajar, después de todo, tenía que vaciar su itinerario el tiempo suficiente para poder ir a la cita con la madre de Inari.
*****
"Es bueno verte, Neko..." - dijo Kakashi al ver a su vieja compañera de trabajo de cabello morado.
"Ya no soy una ninja Anbu, Kakashi-sama" - respondió Yugao mientras negaba con la cabeza - "Puedes llamarme por mi nombre"
Kakashi asintió con una sonrisa en su mirada, aunque su expresión rápidamente se puso seria, algo que Yugao reconoció como su expresión de temas importantes.
"¿Sucedió algo, Kakashi-sama?" - preguntó Yugao con preocupación.
"Puedes leerlo por ti misma" - respondió Kakashi mientras le entregaba un pergamino a la mujer de cabello morado, quien lo leyó en silencio, solo para reaccionar con una sorpresa que no podía ser ocultada, incluso con sus años de entrenamiento como ninja Anbu.
"¿Esto es en serio?" - preguntó Yugao con un rostro serio luego de poder calmarse - "Porque si es así, son excelentes noticias"
Kakashi simplemente guardó silencio, porque si bien sabía que este día llegaría, él no pensó que sería tan pronto.
"Las cinco grandes aldeas hemos decidido reunirnos para hablar sobre Akatsuki en el territorio neutral de Tetsu no Kuni" - dijo Kakashi mientras le pedía a la mujer de cabello morado que guardara el pergamino para que se lo entregara a Kurama o Kushina - "Lo hemos decidido llamar la cumbre de los cinco Kage, por obvios motivos"
"Supongo que el nombre solo es referencia a la participación de los líderes militares" - dijo Yugao con el ceño fruncido - "Porque de ser así, no tiene sentido que me estés informando esto para pasarle los datos a Kushina-sama"
"Exacto, es un simple nombre que le dimos para que el resto del mundo entendiera la importancia de esta junta, pero no significa que otras aldeas no puedan participar" - respondió Kakashi mientras se encogía de hombros - "Aunque obviamente esto también significa que si quieres participar, tienes que tener cierto nivel"
Yugao asintió en silencio antes de pensar con cuidado - "Voy de inmediato, si la reunión tiene que ver con Akatsuki, Kushina-sama y Kurama-sama tienen que saberlo"
"Ve con cuidado" - dijo Kakashi mientras veía a su antigua compañera desaparecer.
Yugao rápidamente llegó a las afueras de Konoha, solo para sacar un pergamino y activarlo.
[¿Yugao-chan?]
"Kushina sensei, tengo información importante que Kakashi-sama me acaba de entregar" - respondió Yugao con el rostro serio - "Es por eso que le pido que me lleve a Uzushiogakure no Sato con el Jutsu de invocación inversa"
Un silencio profundo invadió el lugar antes de que el cuerpo de la mujer de cabello morado desapareciera de las afueras de Konoha, apareciendo en la habitación de Kushina, quien la estaba mirando con el rostro serio porque ella conocía a su estudiante.
Yugao rápidamente le entregó el pergamino a la hermosa mujer de cabello rojo, quien lo leyó en silencio con el ceño fruncido, aunque luego de unos minutos de contemplación, ella relajó su expresión.
"Esto es perfecto, pero al mismo tiempo siento un mal presentimiento" - dijo Kushina con el ceño fruncido mientras intentaba entender por qué se sentía de esta manera - "Obito..."
"¿El clan Uzumaki participará en la reunión?" - preguntó Yugao mientras fruncía el ceño porque ella también sentía que había algo que estaban ignorando.
"Por supuesto" - respondió Kushina mientras sacudía la cabeza para intentar dejar de pensar en la situación, solo para sentir cómo su pergamino de comunicación empezaba a vibrar, lo que significaba que alguien intentaba contactarla - "Voy a contestar, ve a entregarle el pergamino a Kuro-chan"
"Entendido" - respondió Yugao mientras veía cómo los líderes de las grandes aldeas empezaban a negociar con su maestra para usar nuevamente el sello de dilatación temporal.
Yugao simplemente negó con la cabeza antes de llegar donde Kurama, quien estaba trabajando en su oficina - "Kurama-sama"
"¿Yugao?" - preguntó Kurama mientras continuaba con su mirada en los documentos a mano - "¿Qué sucede?"
"Kakashi-sama acaba de pasarme esta información" - respondió Yugao mientras le entregaba el pergamino.
Kurama se detuvo cuando escuchó esto, solo para fruncir el ceño al tomar el pergamino y empezar a leerlo, aunque su expresión cambió ligeramente porque si bien esto era algo que se esperaba, no pensó que sería tan pronto - "Ya veo..."
"Kushina-sama dijo que el clan Uzumaki participaría en la cumbre de los cinco Kage" - dijo Yugao con el rostro serio - "¿Qué piensa usted, Kurama-sama?"
Kurama se quedó en silencio mientras veía la fecha, dos meses, con la posibilidad de que la fecha se adelante, solo para fruncir el ceño porque sentía que no estaba pensando en algo que era de suma importancia.
Unos cuantos segundos más pasaron, solo para que Kurama abriera los ojos, sorprendido al llegar a una conclusión.
"¿Esto no es demasiado bueno para Akatsuki?" - murmuró Kurama con una mirada afilada, pensando en la posibilidad, una que mientras más la analizaba, más certera se ponía.
"¿Kurama-sama? ¿De qué está hablando?" - preguntó Yugao con sorpresa porque no entendía la reacción de su maestro.
"Piénsalo, Yugao-san" - dijo Kurama con una mirada seria en su rostro - "¿Qué van a hacer los 5 líderes de las más grandes aldeas?"
"Reunirse para discutir sobre Akatsuki" - respondió Yugao con el ceño fruncido - "¿Eso qué tiene de raro?"
"Eso no tiene nada de raro, de hecho, es algo natural" - respondió Kurama mientras negaba con la cabeza, indicando que ese no era el problema - "El asunto aquí es que como dijiste, los cinco líderes militares de las más grandes aldeas de las [Naciones Elementales], se están reuniendo en un único punto"
Cuando Kurama remarcó sus palabras, la expresión de Yugao cambió drásticamente porque por fin comprendía por qué sentía que había algo raro en todo esto.
"¡Cinco objetivos en un solo lugar!" - exclamó Yugao con el rostro pálido.
"Exacto" - respondió Kurama con el ceño fruncido - "Si bien la cumbre de los cinco Kage es el lugar más seguro debido a la fuerza de estos mismos, también es el lugar más susceptible a un ataque terrorista"
"Pero si lo que dice es cierto, los demás Kage tienen que tenerlo en cuenta" - respondió Yugao con el ceño fruncido, después de todo, ella estaba segura de que los líderes militares de las cinco grandes aldeas, no eran tan estúpidos como para pasar por alto esto, incluso si lo fueran, al menos uno de ellos lo comprendería.
"Es por eso que tengo el presentimiento que hay algo más en esta reunión" - dijo Kurama mientras fruncía el ceño con el rostro serio.