Cuando la noche llegó, Kurama estaba descansando en una de las habitaciones de la mansión de la líder de la aldea de mujeres, posiblemente esperando porque podía sentir las emociones erráticas de la princesa del lugar.
El joven de cabello rojo estaba con los ojos cerrados, aunque rápidamente los abrió cuando sintió la presencia de Shizuka en la puerta, la cual se abrió, mostrando que la princesa de [Villa Nadeshiko] estaba vistiendo un babydoll negro que era prácticamente transparente. La chica estaba con el rostro rojo por la vergüenza mientras se mordía el labio - ". . ."
Kurama la observó en silencio mientras sentía la presencia de Miya en la cercanía, posiblemente observando todo en silencio.
"Perdón pro interrumpir tan tarde en la noche" - dijo Shizuka mientras agachaba la cabeza con las orejas rojas.
Kurama mantuvo su silencio mientras observaba las curvas de la chica, que honestamente eran más grandes de lo que pensaba, tal parecía que su ropa era extremadamente ajustada.
Un silencio incómodo invadió la habitación mientras Shizuka levantaba la mirada en búsqueda de algo en los ojos del pelirrojo, solo para soltar un suspiro y sentir cómo se calmaba poco a poco.
"Kurama-dono..." - murmuró Shizuka con un estado más calmado - "He venido a concretar la tradición, ahora que has pisado mi aldea, es hora de que nos unamos como esposos"
Kurama asintió en silencio mientras notaba cómo la presencia de Miya estaba cada vez más cerca.
"Al concretar esta unión, mi cuerpo y alma serán tuyos, y tú serás mío" - dijo Shizuka con el rostro serio - "Caminaremos el mismo camino, avanzaremos los mismos pasos, viviremos la misma vida, tus deseos serán mis deseos, mis aspiraciones serán tuyas"
Kurama levantó una ceja, pensando si esto también era parte de la tradición de esta aldea.
"Pero... si me rechazas en este momento, entonces tendré que ser desterrada" - dijo Shizuka con el rostro serio - "Es por eso que te pregunto... ¿Estás listo?"
"Estoy listo" - respondió Kurama con total honestidad porque él podía sentir el temor en el cuerpo de la chica, después de todo, este era el momento más importante de su vida.
Con las palabras de Kurama, Shizuka sintió cómo un enorme peso por fin se caía de sus hombros, porque si bien los dos habían aceptado esta unión con palabras, si no se concretaba entonces ella sufriría las consecuencias, porque era obvio que con el nivel de poder del joven pelirrojo él podría soportar todos los ataques de su aldea.
"Gracias" - murmuró Shizuka con una pequeña sonrisa sobre sus labios, solo para caminar delante del pelirrojo y quitarse la poca protección que cubría su rostro, mostrando por completo su pálida y delicada piel, sus pezones erectos, su inmaculada entrepierna.
La joven princesa de [Villa Nadeshiko] soltó un pesado suspiro antes de empezar a desnudar a su futuro esposo, mostrando su cuerpo bien entrenado. Sus dedos se movieron desde sus pectorales, bajando hasta su entrenado estómago, llegando con nervios hacia la masculinidad que estaba despertando.
Shizuka se sonrojó mientras su delicada mano empezó a frotar el miembro de su amante, sintiendo cómo con cada frote este estaba cada vez más duro, lo que causó que ella tragara saliva inconscientemente.
Kurama cerró los ojos, disfrutando de la caricia de la mujer, quien estaba respirando con dificultad, incluso él podía escuchar su corazón latiendo tan fuerte que parecía que estaba a punto de escapar de su generoso pecho.
"Por favor, sé delicado conmigo, esta es mi primera experiencia" - murmuró Shizuka con rubor en sus mejillas.
Kurama la tomó de las mejillas y besó sus labios, solo para mover sus manos hacia sus generosos pechos.
Shizuka sintió cómo su cuerpo se paralizaba, solo para sentir cómo su temperatura corporal aumentaba con cada caricia, aunque empezó a ponerse nerviosa cuando sintió cómo la juguetona mano de Kurama estaba bajando hasta llegar hasta su entrepierna.
La princesa de [villa Nadeshiko] estaba empezando a respirar con dificultad, aunque su expresión se congeló cuando sintió cómo los dedos del chico invadían su jardín secreto, soltando un pequeño grito de sorpresa y placer - "¡Ah ~!"
Mientras Shizuka parecía hundirse en esta nueva experiencia de placer, Kurama escuchó cómo la puerta se abría ligeramente, así como empezó a sentir una mirada posándose sobre ellos. Era obvio quién era la dueña de estos ojos, Miya, la madre de la chica que estaba empezando a experimentar el placer de la carne.
Viendo que la chica estaba lista, Kurama usó un poco de chakra para lubricar su miembro para que fuera más fácil entrar dentro de la chica, quien soltó un grito de placer y dolor entremezclado.
Las paredes vaginales de la chica se contrajeron al sentir el caliente y duro miembro del joven invadir su interior, como si no quisieran que este invasor continuara avanzando, pero para su desgracia eso era imposible porque Kurama era como una fuerza militar imparable.
Shizuka soltó un chirrido de placer y dolor al sentir al pene del chico llegar hasta la profundidad de su interior, rozando cada punto sensible posible - "¡Ah ~!"
La princesa de [villa Nadeshiko] no sabía cómo reaccionar ante esta situación porque como había dicho antes, era su primera vez experimentando algo como esto, así que dejó que su cuerpo se moviera por si mismo. Sus brazos rápidamente rodearon el cuerpo del chico, sus labios se posaron sobre los de él mientras ella presionaba su cuerpo con todas sus fuerzas, como si ella quisiera fusionarse con su esposo.
Shizuka podía sentir cómo su vagina estaba temblando, el dolor había desaparecido rápidamente gracias a la tolerancia generada por el entrenamiento exhaustivo, así como el chakra de Kurama que estaba permeando todo su cuerpo.
Son saber cuánto tiempo había pasado, Shizuka podía sentir su cuerpo perdiendo fuerza debido al creciente placer que se acumulaba en su interior. Ella había perdido la cuenta de cuantas veces había llegado al clímax, cuantas veces el chico había golpeado cada punto G como si los conociera de memoria, lo que sí sabía, era que ella no podía más.
"¡Me vengo!" -exclamó Shizuka con terror porque podía sentir cómo su mente se ponía en blanco, cómo su visión se ponía nublosa por el placer, cómo su cuerpo cansado parecía estar deseando llegar a este clímax.
Kurama no respondió, él soltó un gruñido de placer mientras le daba una última estocada, liberando todo el contenido de sus bolas en el interior de la chica, quien arqueó la espalda en éxtasis al sentir el líquido blanco invadiendo su interior, llegando así a su clímax final antes de perder la consciencia.
El joven de cabello rojo rápidamente la tomó en sus brazos al sentir su cuerpo relajándose, cómo su generoso pecho subía y bajaba debido al agotamiento, cómo su cuerpo sudoroso estaba paralizado por el placer, así que sin pensarlo dos veces él se retiró de su interior y la recostó en la cama, solo para notar cómo el cielo parecía iluminarse, demostrando que sorprendentemente la primera vez de Shizuka había durado hasta el día siguiente.
Kurama soltó un suspiro antes de fruncir el ceño al sentir el aroma de la excitación apareciendo por la abertura de la puerta, así que rápidamente apareció en el lugar y la abrió por completo, notando cómo Miya estaba con su ropa desarreglada, el rostro rojo y con jugo de amor saliendo de su entrepierna, así como escurriendo de sus dedos.
"¿Alguna vez te han dicho que es de mala educación observar a una pareja tener sexo?" - preguntó Kurama con el ceño fruncido. Él realmente había pensado que la madre de su ahora pareja se quedaría por unos minutos para confirmar la unión y luego se iría, él no pensó que no solo esta pervertida se quedaría a mirar hasta el final, sino que a mitad de camino ella empezaría a darse placer mientras los observaba teniendo sexo.
"P-Puedo explicarlo" - dijo Miya con el rostro rojo por la lujuria y la vergüenza, solo para soltar un gemido de placer al sentir cómo el joven de cabello rojo presionaba su pie contra su entrepierna - "¡Ah ~!"
Kurama levantó una ceja porque reconoció esa expresión de inmediato, así que rápidamente creó un clon y una barrera para prevenir que los escucharan.
Miya soltó un grito de sorpresa, terror, y emoción cuando vio a los dos Kurama acercándose - "¿Q-Qué vas a hacer conmigo?"
Kurama no respondió, simplemente miró a la mujer con sus ojos brillando con sadismo mientras que su clon sacaba una cuerda, lo que causó que Miya sintiera cómo su entrepierna 'llorara de la emoción'.
Cuando Shizuka despertó, lo primero que vio fue a su madre colgando del techo con una cuerda rodeando cada curva de su cuerpo con un nudo de tortuga, así como su rostro completamente rojo por la vergüenza, el placer y el dolor - "¡¿Qué carajos pasó mientras yo estaba durmiendo?!"
"Es una larga conversación" - respondió Kurama, o mejor dicho, un clon mientras entraba a la habitación con un desayuno para las dos mujeres - "Podemos hablarlo luego de comer"
Shizuka simplemente soltó un suspiro pesado porque era bastante obvio que su madre era la mayor culpable de esta extraña e incómoda situación, así que decidió asentir, comer, y luego preocuparse de lo que pasaba delante de ella - "Ok, tengo hambre..."