"Así que este es el nuevo mundo del que hablaba" - dijo una hermosa voz mientras un grupo de 7 mujeres salía de un portal, siendo liderados por Celestine Lucross, la bella diosa élfica - "Se siente no solo diferente, sino lleno de poder mágico"
La mujer que estaba hablando, no parecía superar los 20 años, cabello rubio largo, con una armadura que a duras penas cubría las partes delicadas de su cuerpo curvilíneo.
"Alicia Onee-sama, este lugar parece tan puro, tan delicado" - dijo una chica un poco menor que ella, cabello rosado, ojos azules igual que su prima, y un cuerpo más desarrollado a pesar de la diferencia de edad - "Es hermoso ~"
Alicia miró a Prim con una leve sonrisa en su rostro, solo para volver a su expresión fría porque sabía que ellas habían llegado a los dominios de un hombre que había logrado conquistar a la reina más fuerte de toda Eostia.
"¡Princesa Prim!" - exclamó una linda chica de baja estatura, cuya apariencia no parecía superar los 13-15 años a pesar de su edad avanzada - "¿Vamos a investigar los alrededores?"
"¡Oh ~! ¡Eso suena maravilloso, Luu-Luu-chan!" - exclamó Prim con una feliz sonrisa mientras miraba a su prima, como si estuviera pidiéndole permiso.
Alicia frunció el ceño porque no le gustaba la idea de dejar a su prima sola con la Halfling, más que nada porque al igual que su apariencia, Luu-Luu era extremadamente infantil.
"Déjalas, este lugar no es peligroso" - respondió una hermosa mujer con apariencia digna de una princesa oriental, quien estaba vistiendo un traje de sacerdotisa, al menos en la parte superior, porque la parte inferior, ella solo tenía una prenda que cubría su entrepierna.
"¿Lo viste con tus poderes, Kaguya-dono?" - preguntó Alicia con seriedad.
"No, lo puedo ver en el rostro relajado de Celestine-sama" - respondió Kaguya mientras le daba una mirada en blanco a su compañera - "Pero si de verdad no te sientes tan a gusto, puedes pedirle a Maia-dono que las acompañe"
"Esa es una excelente idea" - asintió Alicia mientras miraba a la más nueva integrante de su grupo, la princesa mercenaria, y antigua aliada de Kuroinu.
"Claro, yo también tengo curiosidad por conocer más este lugar" - respondió Maia, una hermosa mujer de cabello de cabello rojo, quien estaba usando una chaqueta abierta que mostraba sus enormes pechos, la cual llegaba hasta su entrepierna.
Mientras las chicas planeaban su próximo movimiento, había una única mujer que parecía estar hundida en sus pensamientos. Ella era hermosa, igual que sus compañeros, solo que a diferencia del resto, ella tenía un encanto maduro, el cual resaltaba debido a su erótica armadura que solo cubría sus extremidades, sus grandes pechos, y su jardín secreto.
"¿Sigues pensando en su esposo, Claudia?" - preguntó Celestine con una expresión incómoda en su rostro, porque ella sabía lo mucho que su subordinada más leal, todavía amaba a Klaus, a pesar de que él no haya hecho nada para intentar defenderla, o protegerla de las acciones de su padre.
"No voy a mentir, Celestine-sama, sigue doliendo" - murmuró Claudia mientras soltaba un suspiro pesado - "Verlo apoyar a su padre, incluso después de que todo haya salido a la luz, incluyendo el plan de no solo abusar de mí, sino el intento de alianza con el grupo mercenario Kuroinu... es doloroso..."
Celestine puso su mano en el hombro de su subordinada mientras pensaba en cómo ayudarla, y aunque no le gustara la idea, tal vez, la mejor solución era 'imitar' el accionar de Vult, en otras palabras, convencerla a través del pecado.
"Celestine-sama... ¿Cuál es nuestro siguiente movimiento?" - preguntó Alicia mientras miraba a su líder máxima - "¿A caso es reunirnos con su... esposo?"
"Hmm..." - Celestine guardó silencio cuando escuchó esto mientras pensaba detenidamente, aunque luego de unos segundos de espera, la diosa élfica activó su maná para detectar la presencia de Cloud, aunque su expresión cambió cuando vio algo que la dejó avergonzada, no porque estuviera viendo algo prohibido, sino porque ella no era la única que había visto lo que estaba sucediendo al otro lado del bosque.
"¿Celestine-sama?" - preguntó Alicia con el ceño fruncido al notar cómo la diosa elfo estaba mirándola con incomodidad - "¡¿A caso algo le sucedió a Prim?!"
"B-Bueno, no exactamente" - respondió Celestine mientras negaba con la cabeza antes de decirles que la siguieran, tal vez lo que estaban a punto de ver, las ayude a comprender la situación.
El grupo rápidamente avanzó, solo para ver cómo habían llegado al lugar donde estaban Maia, Prim y Luu-Luu, quienes tenían sus ojos pegados en la escena que estaba delante de ellas, todas observando mientras frotaban sus muslos, como si desearan hacer algo, pero no tuvieran el valor de hacerlo.
Alicia frunció el ceño el ceño, pero su rostro se puso rojo por la vergüenza, después de todo, delante de ella estaban un apuesto hombre rubio, piel bronceada y orejas alargadas como la de su maestra, teniendo relaciones sexuales con dos mujeres que ella conocía bien.
Olga discordia y su subordinado, Chloe, las dos besándose mientras el hombre parecía querer crear un túnel en el interior de la elfo oscuro de cabello rubio, aunque lo más extraño, era que ellas no podían escuchar nada a pesar de que Chloe parecía estar gimiendo como un animal.
"Oh, dios" - murmuró Prim mientras se mordía el labio porque podía sentir cómo algo dentro de ella estaba despertando - "E-Esto es..."
"Oh..." - Maia estaba igual, con sus mejillas rojas mientras se lamía el labio porque podía ver cómo el hombre salía del interior de Chloe y entraba en Olga, mostrando su dura masculinidad - "Eso es impresionante..."
"¡D-Dejen de verlo!" - exclamó Alicia con vergüenza - "¡Prim!"
"¡¿Alicia Onee-sama?!" - exclamó Prim con vergüenza porque no había detectado la presencia del resto de las 7 Himekishi (Princesas Caballero) - "¡Esto no es lo que parece!"
Claudia no respondió, ella simplemente observó analíticamente a su antigua enemiga, quien parecía estar llegando al clímax, a la par de que notaba sus miradas, lo que trajo una enorme sonrisa en su rostro. Ella incluso pudo notar cómo Olga le susurraba algo al oído al hombre, quien asintió antes de llegar los dos al clímax.
Celestine se mordió el labio, aunque al mismo tiempo estaba sorprendida porque a pesar de saber que ese hombre elfo oscuro era Cloud, su cambio de raza era algo que ella no había visto antes - "¿A caso es una nueva habilidad?"
Celestine se quedó en silencio unos cuantos segundos antes de negar con la cabeza y caminar hacia el lugar donde estaban teniendo relaciones los tres elfos oscuros, solo para destruir la barrera.
"Llegaron más rápido de lo que pensaba" - dijo Olga mientras continuaba moviendo sus caderas.
"¡¿Podrías dejar de hacer eso?!" - exclamó Alicia mientras tapaba los ojos de su prima, quien parecía no tan feliz con esta acción.
Cloud rápidamente volvió a su apariencia normal, sorprendiendo a las chicas, y haciendo que Olga bufara con molestia, más que nada porque era obvio que el tiempo de diversión había terminado, al menos Chloe ahora estaba feliz con su nueva vida.
"Chloe, es tiempo de volver a casa" - dijo Olga mientras notaba cómo la chica elfo oscuro de cabello rubio, estaba temblando en el suelo, con líquido blanco brotando de su entrepierna, y con una expresión de absoluto placer - "Chloe..."
"¿Olga-sama?" - murmuró Chloe mientras recuperaba la compostura, solo para notar la llegada de sus antiguas enemigas - "!"
Con el rostro rojo, Chloe rápidamente tomó su ropa y salió corriendo, avergonzada de que alguien más que Olga y su nuevo maestro, hayan visto su rostro lleno de lujuria.
Cloud simplemente negó con la cabeza, pensando que la actitud de las chicas salidas del mundo de historias para adulto, era mucho más fácil de conquistar que las chicas del mundo del anime.
"¿Desde cuándo puedes cambiar de raza, Cloud?" - preguntó Celestine mientras chasqueaba la lengua al ver cómo su amado se había vestido rápidamente.
"Una habilidad que descubrí un poco después de que ustedes regresaran a Eostia" - respondió Cloud mientras su cuerpo cambiaba, tomando una apariencia similar a la de Celestine, quien rápidamente sintió cómo su vientre temblaba de la emoción. Oh, no la malinterpreten, Celestine amaba a Cloud, pero incluso ella tenía que admitir que la apariencia élfica de Cloud era tan deliciosa, que estaba despertando su deseo reproductivo.
"¡Tú!" - exclamó Luu-Luu mientras sus ojos brillaban con emoción - "¿Puedes tomar una apariencia similar a la de Luu-Luu?"
Cloud bajó la mirada, solo para acariciar su mentón, pensando en cómo responder, aunque luego de unos segundos, su cuerpo empezó a cambiar, reduciendo su tamaño drásticamente y tomando la apariencia de su yo más joven - "¿Algo así?"
"Hmm..." - Luu-Luu entrecerró los ojos mientras analizaba detenidamente al joven delante de ella, solo para negar con la cabeza - "No, esto es diferente... ¿Tal vez sea porque la raza de Luu-Luu solo existen mujeres?"
Cloud rápidamente regresó a su apariencia original, pensando detenidamente antes de asentir - "Es posible..."
"Oh, es una lástima... Luu-Luu quería reproducirse con alguien parecido a ella" - murmuró Luu-Luu mientras soltaba un suspiro pesado.
El resto simplemente la miró con sorpresa, aunque rápidamente sacudieron la cabeza, porque a pesar de su apariencia juvenil, Luu-Luu era mucho mayor que muchas de ellas.