La mañana del cuarto día en Gaia amaneció con una atmósfera de propósito renovado en la Base Umbrella. Mientras un grupo de humanoides, bajo la atenta mirada de Miguel, realizaba ejercicios básicos de calentamiento y manejo de armas en el claro frente a la base, Carlos se reunía en la Sala de Control con Daniel, Alejandro y Ana, quienes formarían el equipo de expedición del día.
—Muy bien, equipo —comenzó Carlos, señalando el mapa holográfico—. Nuestro objetivo hoy es doble. Primero, necesitamos los componentes para la especialización médica de Lucía: un **Componente Biológico Refinado** y **Fluido Vital**. Segundo, buscaremos **Fibra Textil Avanzada** para la especialización de Elena como Artesana.
**[Análisis de datos y entorno sugieren lo siguiente:]** intervino el Sistema.
**[- Componente Biológico Refinado: Las Glándulas Luminiscentes de Hexápodo que poseen pueden ser procesadas en el Laboratorio. Se requiere una unidad. No es necesario buscar más por ahora.]****[- Fluido Vital: Se ha detectado una especie de planta, la *Flora Vitalis*, que crece en áreas húmedas y sombreadas, a menudo cerca de fuentes de agua dulce. Sus flores segregan un néctar que es un potente Fluido Vital. Se ha identificado una posible concentración a unos 3 kilómetros al noroeste, cerca de un arroyo no explorado.]**
**[- Fibra Textil Avanzada: Ciertas enredaderas arbóreas, conocidas como *Lianas Sedosas*, producen fibras de alta resistencia y flexibilidad. Crecen en árboles maduros en zonas boscosas densas. Hay un sector con alta probabilidad de encontrarlas a 2 kilómetros al suroeste.]**
—Excelente, Sistema. Eso nos da direcciones claras —dijo Carlos—. Dividiremos la misión. Daniel, tú liderarás la búsqueda de la *Flora Vitalis* al noroeste. Lleva contigo a Javier; su fuerza podría ser útil si el terreno es complicado. Alejandro, tú y Ana irán al suroeste en busca de las *Lianas Sedosas*. Su agilidad y tu puntería serán valiosas allí.
—¿Y tú, Carlos? —preguntó Daniel.
—Yo me quedaré en la base supervisando el procesamiento de las Glándulas Luminiscentes y coordinando con Miguel el entrenamiento. Además, quiero que Lucía comience a familiarizarse con los textos médicos básicos que obtuvimos del Cristal de Conocimiento, en preparación para su especialización.
Los equipos asintieron, conformes con el plan. Se equiparon con raciones, herramientas de recolección y sus armas habituales. Miguel les dio a cada grupo algunas instrucciones tácticas antes de que partieran, enfatizando la comunicación y la cautela.
Mientras los dos equipos de expedición se adentraban en el bosque en direcciones opuestas, Carlos se dirigió al laboratorio con Lucía.—Sistema, ¿puedes guiar a Lucía en el proceso de refinamiento de una Glándula Luminiscente para obtener el Componente Biológico Refinado?
**[Afirmativo. El proceso requiere la Unidad de Análisis Biológico del Laboratorio. Es un procedimiento delicado que implica la extracción y estabilización de ciertos compuestos. Tiempo estimado: 20 minutos.]**
Lucía, con una concentración admirable, siguió las instrucciones holográficas proyectadas por el sistema, manipulando con cuidado la brillante glándula verdosa bajo un microscopio avanzado. Carlos observó, impresionado por su destreza.
Mientras tanto, en el exterior, Miguel no perdía el tiempo.
—¡Postura, Marcos! ¡El equilibrio es clave! —corregía Miguel mientras Marcos intentaba mantener una guardia con la lanza—. Teresa, tu movimiento con la espada es demasiado amplio, te deja expuesta. Más corto, más rápido.
Los humanoides restantes —Marcos, Teresa y Elena (que se unía al entrenamiento mientras no estuviera en la Sastrería)— sudaban bajo el sol anaranjado, esforzándose por seguir las rigurosas instrucciones de su nuevo instructor militar. Miguel era exigente pero justo, explicando cada movimiento y la lógica detrás de él.
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**Noroeste: El Arroyo Escondido**
Daniel y Javier avanzaban por un terreno cada vez más húmedo. El sonido de agua corriente se hacía más fuerte, y pronto llegaron a un arroyo cristalino que serpenteaba entre rocas cubiertas de musgo y helechos de hojas anchas y plateadas.
—Según el Sistema, la *Flora Vitalis* debería estar por aquí —dijo Daniel, escudriñando las orillas sombreadas.
Javier, usando su hacha de mano para apartar unas enredaderas gruesas, señaló hacia un pequeño recodo del arroyo. —¡Allí! ¿Son esas?
En un rincón protegido del sol directo, crecían unas plantas singulares. Tenían tallos delgados de un verde casi negro, y en su extremo, una única flor grande, con pétalos de un blanco translúcido que parecían hechos de cristal. Del centro de cada flor goteaba lentamente un líquido espeso y dorado que caía sobre unas hojas en forma de cuenco en la base de la planta.
**[Confirmado: *Flora Vitalis*. El néctar dorado es el Fluido Vital. Recolectar con cuidado para no dañar la flor, ya que puede regenerar el néctar en unas pocas horas.]**
Daniel se acercó con un vial de recolección. —Parece pacífico, pero mantente alerta, Javier.
Mientras Daniel comenzaba a recolectar el precioso fluido, Javier notó un movimiento entre las rocas al otro lado del arroyo. Una criatura parecida a un cangrejo gigante, del tamaño de un perro pequeño, con un caparazón de piedra y pinzas desproporcionadamente grandes, emergió y comenzó a moverse hacia ellos, sus múltiples ojos fijos en las flores.
—¡Daniel, compañía! —advirtió Javier, levantando su hacha.
**[Karkinos Rocoso. Nivel de amenaza: Bajo. Carroñero territorial, atraído por sustancias energéticas. Su caparazón es extremadamente duro, pero sus articulaciones son vulnerables.]**
El Karkinos se movió sorprendentemente rápido. Daniel se apartó justo a tiempo para evitar una de sus pinzas, que golpeó la roca donde estaba con un chasquido.
—¡A las articulaciones! —gritó Daniel, desenvainando su espada.
Javier cargó, su hacha buscando las uniones de las patas del Karkinos. El caparazón desviaba la mayoría de los golpes, pero logró acertar en una pata, haciendo que la criatura trastabillara. Daniel aprovechó la apertura para clavar su espada en la articulación de una de las pinzas, que se desprendió con un crujido. El Karkinos emitió un siseo agudo y se retiró cojeando hacia las rocas, desapareciendo de la vista.
—Eso estuvo cerca —dijo Javier, respirando con agitación.
—Buen trabajo —asintió Daniel—. Recolectemos rápido el Fluido Vital y volvamos. Necesitamos al menos tres unidades.
Consiguieron recolectar cinco viales del néctar dorado antes de emprender el camino de regreso, sintiéndose satisfechos con su éxito.
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**Suroeste: El Bosque Denso**
Alejandro y Ana se movían con sigilo a través de un sector del bosque donde los árboles eran más altos y sus copas formaban un denso dosel que apenas dejaba pasar la luz. El aire era fresco y olía a tierra húmeda y vegetación en descomposición.
—Las *Lianas Sedosas* deberían estar en los árboles más viejos —murmuró Alejandro, sus ojos escrutando las alturas.
Ana, más pequeña y ágil, se deslizaba entre la maleza, examinando los troncos. Fue ella quien las encontró primero. —¡Alejandro, mira!
Enroscadas alrededor del tronco de un árbol gigantesco, de corteza rugosa y grisácea, había unas lianas de un color verde pálido casi plateado. Eran gruesas como un brazo y parecían tener una textura suave y brillante.
**[Confirmado: *Lianas Sedosas*. Las fibras internas son extremadamente resistentes y flexibles. Se requiere cortar secciones y luego procesarlas para extraer la Fibra Textil Avanzada.]**
—Necesitaremos varias de estas —dijo Alejandro, sacando un cuchillo robusto—. Ten cuidado, Ana. Este tipo de árboles suelen ser el hogar de...
No pudo terminar la frase. Un zumbido grave llenó el aire, y del dosel superior descendió una criatura voladora del tamaño de un águila, con alas membranosas de insecto, un cuerpo segmentado cubierto de quitina oscura y un largo aguijón en la cola.
**[Vespix Arbóreo. Nivel de amenaza: Medio-Bajo (individualmente), Medio-Alto (en enjambre). Avispa cazadora territorial. Su aguijón inocula un veneno que causa dolor intenso y desorientación. Vulnerable en las uniones de las alas al tórax.]**
—¡Solo uno, por ahora! —gritó Alejandro, tensando su arco.
El Vespix se lanzó en picado hacia Ana. Ella rodó por el suelo, esquivando el aguijón por centímetros. Alejandro disparó una flecha que impactó en una de las alas del Vespix, haciéndolo chillar y volar de forma errática por un momento.
Ana aprovechó la distracción para levantarse y lanzar su daga. La hoja giró en el aire y se clavó en la unión de la otra ala con el cuerpo del Vespix. La criatura cayó al suelo con un golpe sordo, agitando sus patas inútilmente. Alejandro se acercó y remató al insecto con otra flecha.
—Eso fue demasiado rápido —dijo Ana, recuperando su daga. Su rostro estaba pálido, pero sus manos firmes.
—Lo hiciste bien —la tranquilizó Alejandro—. Pero donde hay uno, suele haber más. Cortemos las lianas rápido.
Trabajaron con celeridad, cortando varias secciones largas de las Lianas Sedosas. Mientras lo hacían, escucharon más zumbidos provenientes de las alturas.
—Tenemos que irnos —apremió Alejandro, cargando su parte de las lianas—. ¡Ahora!
Justo cuando comenzaban a retirarse, dos Vespix más descendieron, bloqueándoles el camino.
—¡Cúbreme! —gritó Ana. Corrió hacia un árbol cercano y, con una agilidad sorprendente, comenzó a trepar, usando las irregularidades de la corteza como apoyo.
Alejandro disparó flechas para mantener a raya a los Vespix, logrando herir a uno en el abdomen. El otro intentó seguir a Ana, pero ella, desde una rama más alta, se lanzó sobre su espalda, aferrándose con fuerza y clavando su daga repetidamente en la base de su cabeza. El Vespix se sacudió violentamente y cayó, llevándose a Ana consigo.
Alejandro corrió hacia ella mientras el último Vespix herido se retiraba hacia el dosel. Ana se levantó con un gemido, agarrándose el brazo.
—¿Estás bien?
—Me golpeé al caer, pero creo que estoy entera —dijo, examinando su brazo—. Solo un raspón. Pero esa cosa era fuerte.
—Lo fuiste más tú —sonrió Alejandro—. Eres rápida y valiente. Ahora, salgamos de aquí antes de que vuelva con refuerzos.
Cargados con las Lianas Sedosas, y con Ana cojeando ligeramente pero decidida, emprendieron el camino de regreso, la tensión del encuentro aún vibrando en el aire.
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De vuelta en la Base Umbrella, los dos equipos llegaron casi al mismo tiempo, presentando sus hallazgos a Carlos. Lucía ya había logrado procesar con éxito la Glándula Luminiscente, obteniendo un pequeño vial con un gel brillante: el Componente Biológico Refinado.
—¡Excelente trabajo, todos! —exclamó Carlos, aliviado y orgulloso—. Tenemos el Fluido Vital y las Lianas Sedosas. Sistema, ¿podemos procesar estas lianas para obtener la Fibra Textil Avanzada?
**[Afirmativo. El procesamiento de las Lianas Sedosas requiere el Telar Avanzado del Área de Sastrería Nivel 1. Elena puede supervisar el proceso. Se estima que con las lianas recolectadas se pueden obtener aproximadamente 15 unidades de Fibra Textil Avanzada. Tiempo de procesamiento por unidad: 5 minutos.]**
—Elena, tienes trabajo —sonrió Carlos.Con todos los componentes casi listos, la especialización de Lucía y Elena estaba al alcance. Carlos se sentía optimista. El entrenamiento de Miguel estaba progresando, y los equipos de recolección habían demostrado ser capaces y resilientes.
Mientras Elena se dirigía a la Sastrería para comenzar a procesar las lianas, Lucía se acercó a Carlos.
—Carlos, mientras esperaba, estuve revisando los datos médicos del Cristal de Conocimiento. Hay... mucho que aprender. Pero también encontré referencias a plantas con propiedades curativas más allá del Fluido Vital, algunas que podrían ayudar a tratar heridas más graves o incluso neutralizar toxinas más complejas.
—Eso es muy interesante, Lucía —dijo Carlos—. Una vez que seas Médico, tu primera tarea de investigación podría ser catalogar esas plantas y sus usos.
La base bullía de actividad. El sonido del entrenamiento en el exterior, el zumbido del laboratorio y ahora el rítmico clack del telar en la Sastrería. Eran los sonidos del progreso.
Carlos miró el mapa, donde la señal anómala al sur seguía parpadeando. Pronto, muy pronto, tendrían un equipo lo suficientemente fuerte y especializado como para investigar esos misterios más lejanos. Pero por ahora, se concentrarían en fortalecer su núcleo, un especialista a la vez.